¿Podré vender mi empresa en crisis?
En los últimos meses hemos visto como las cuentas de resultados de muchas de las empresas de nuestro país se han ido deteriorando de forma paulatina. Un análisis sectorial ya nos venía advirtiendo de que el enfriamiento de nuestra economía era un hecho constatable y que nos íbamos inexorablemente a una recesión.
La caída de las ventas y beneficios han hecho que muchas medianas y pequeñas empresas hayan tenido que incrementar sus deudas elevando su grado de apalancamiento financiero.
Para solventar esta situación, muchos empresarios han aportado bienes personales incluso han hipotecado sus casas con el propósito de solucionar la crisis económica.
Debemos ser conscientes de que cuando se aporta el patrimonio personal y la empresa tiene dificultades para hacer frente a sus deudas nos encontramos ante una empresa en crisis.
Hay tres vías para solucionar la situación:
1.- Vender la empresa.
2.- Acuerdo extrajudicial con los acreedores.
3.- Concurso de acreedores.
El acuerdo extrajudicial supone la aceptación voluntaria de los acreedores de un calendario de pagos que permita continuar con la actividad de la empresa y al mismo tiempo poder satisfacer los compromisos adquiridos con terceros. En este caso la clave radica en la confianza que tengan los acreedores respecto al plan de negocio que haga viable la continuidad de la empresa.
En el caso del concurso de acreedores, el empresario pasa a ser un mero espectador. Ya no tendrá en control ni podrá tomar decisiones, que siempre estarán lideradas por el administrador judicial. El objetivo del concurso es intentar dar continuidad a la empresa, acordando calendarios de pagos e incluso quitas de deudas con los acreedores con el propósito de reflotar el negocio.
La realidad es que la mayoría de los concursos acaban en liquidación y el empresario, al ser el último en cobrar, no recibirá nada por la empresa, e incluso si hay bienes personales en juego, lo mas probable es que también los pierda.
¿Porqué es la venta de empresas de la empresa una solución?
La crisis de coronavirus (covid-19) nos ha pillado por sorpresa en un momento en el que todos los indicadores macroeconómicos apuntaban a un fin del ciclo económico.
En los años de bonanza, vemos como en ciertos sectores en los que no hay fuertes barreras de entrada (ni de salida), se sucede la entrada de nuevos jugadores, ávidos por aprovecharse del crecimiento del sector, que incrementan la competencia y la oferta en el mercado.
Muchos de estas empresas surgen para aprovecharse de la fase expansiva del ciclo económico, pero no tienen unos fundamentales sólidos ni unas economías de aprendizaje que si tienen los líderes del sector. Cuando el consumo cae y la economía entra en recesión, estas son las primeras empresas en mostrar esa debilidad cayendo inexorablemente en un cierre mas temprano que tarde.
Si nuestro modelo de negocio es sólido y estamos atravesando un momento complicad, tal vez la mejor opción sea vender la empresa en crisis como una solución a nuestro problema.
Aunque la crisis sanitaria a impactado de lleno en toda la actividad económica afectando a la mayoría de los sectores, más de la mitad de los ejecutivos prevé cerrar una operación de fusión o adquisición en los próximos 12 meses.
Muchos empresarios pensarán que no es el mejor momento y que incluso conseguirán tan poco por la venta de su empresa que nos le va a merecer la pena. Todo apunta que durante el año que viene se procederá a la recuperación del crecimiento económico, sobre todo en los sectores menos afectados por la crisis.
Los compradores siguen estando ahí, únicamente que actúan con mas cautela dada la incertidumbre que asola el mercado. Si tenemos confianza en el negocio y creemos que pasada la crisis, con la correspondiente inyección de liquidez, nuestro negocio puede continuar.
Lo primero que tenemos que hacer es un plan de negocio que permita justificar ante un potencial comprador la viabilidad futura de la empresa, así como su capacidad para generar flujo de caja futuro.
Antes las opciones de liquidar o vender por muy poco precio, está la opción de condicionar parte del precio, al cumplimiento del plan de negocio que hayamos establecido. Esto permitirá al comprador reducir su incertidumbre en la operación ya que la mayor parte del precio estará condicionada a que la empresa va a evolucionar de forma favorable.
Por otro lado, el vendedor puede conseguir la venta de su empresa en óptimas condiciones, presentándose como la forma mas razonable en un momento de crisis.
En PRETIVM somos expertos en el asesoramiento integral en la venta de sociedades y negocios en crisis o en situaciones de insolvencia.