El economista palentino Jaime Villagrá crea “Pretivm” para asesorar en la compraventa de pymes en Castilla y León con el objetivo de dar continuidad a la actividad empresarial y mantener el empleo.
Dar una segunda vida a una empresa para mantener la riqueza y el empleo que genera en Castilla y León. Es el objetivo que se ha propuesto un joven emprendedor, el economista palentino Jaime Villagrá, que pone su experiencia al frente de adquisiciones en el entorno multinacional al servicio de las pequeñas y medianas empresas para llevar a buen puerto la compraventa de pymes. Pretivm, con sede en Valladolid, nació en septiembre pasado y en menos de cuatro meses negocia el futuro de seis empresas de la Comunidad, vinculadas sobre todo al sector agroalimentario.
Las estadísticas oficiales hablan de la venta de 3.000 empresas cada año en España, aunque no existen cifras por regiones. Hay otro dato constatado y es que el 70 por ciento de las empresas familiares en Castilla y León no llega a la tercera generación. Es decir, hay un mercado latente de empresarios que se jubilan y no tienen descendencia, graves enfermedades que obligan a deshacerse de un negocio, deseo de capitalizar una empresa para emprender una nueva actividad, desavenencias entre socios, ampliaciones de capital o transferencia de líneas no estratégicas.
La labor de Villagrá se ha realizado hasta ahora por las auditoras y los gabinetes de abogados pero en su caso aporta un perfil más profesional, tras su anterior empleo como responsable de control financiero en la empresa de industria auxiliar de la automoción. El cese de actividad de la multinacional alemana en la planta de Palencia supuso una oportunidad para este experimentado economista que llevaba años dándole vueltas a una realidad que afectaba, sobremanera, a Castilla y León: Los empresarios que malvenden sus empresas o en el peor de los casos acaba con el cierre de las compañías por falta de un comprador. Y todo, según Jaime Villagrá, por no contar con un experto y un equipo multidisciplinar en este tipo de operaciones.
La filosofía de Pretivm es prestar el asesoramiento más profesional, obtener la mayor rentabilidad en la venta de una empresa y evitar posibles imprevistos en la operación como futuras deudas. Además, sus honorarios son solo en caso de éxito. «Solo cobro un porcentaje de la transacción si hay venta y es una decisión que corresponde únicamente al vendedor», precisa Villagrá. Es decir, hace accesible un servicio que hasta ahora solo estaba al alcance de las grandes compañías, con departamentos propios o con recursos económicos suficientes para aplicar un protocolo y una metodología financiera.
Tensa negociación. «La gente busca al mejor abogado cuando tiene un problema con la justicia, pero al vender la empresa no lo deja en manos de un profesional pese a que es la principal decisión de su vida laboral y una parte importante de su patrimonio», precisa. Una idea que corrobora al asegurar que el empresario debe continuar centrado en su negocio y seguir ofreciendo lo mejor a sus clientes, proveedores y trabajadores mientras que el experto se centra en una ardua y tensa negociación que es la clave de la operación porque «el comprador siempre encuentra pegas para rebajar el precio».
Jaime Villagrá asegura que hay que adecuar la empresa para incrementar su valor (declarar todas las facturas y tener buenas prácticas financieras), que requiere de una preparación de entre uno y dos años. No en vano, es necesario realizar un estudio sobre los descuentos de flujos de caja para prever contingencias y hacer una proyección del valor de la empresa en el futuro. «Como buen intermediario, los contactos con el posible comprador requieren de la máxima confidencialidad de cara a evitar filtraciones», añade.
Por su experiencia, este economista asegura que más de la mitad de las operaciones de venta tiene como comprador a otra empresa. De ahí que el responsable de Pretivm tenga una cartera de empresas solventes que están interesadas en adquisiciones pero también hay fondos de inversión y familias con capacidad económica. «El panorama está cambiando, las expectativas de futuro en España son buenas, las empresas son más competitivas por lo que cada vez hay más interés en invertir en activos rentables», apunta. De ahí que Jaime Villagrá no descarte, con el tiempo, asesorar también a compradores. «Es fundamental unir la oferta y la demanda de activos porque Castilla y León necesita empresas y no podemos permitirnos que compañías rentables no tenga continuidad», concluye.
Ical – martes, 24 de febrero de 2015